jueves, 29 de septiembre de 2011

Lugares que visitar en Bolivia: Salar de Uyuni

El Salar de Uyuni, una maravilla del mundo según el guía, es el último paraje de Bolivia que he podido visitar (debido a la falta de tiempo, que no de ganas). El viaje sinceramente fue un poco caótico por falta de previsión xD. En esta ocasión vino con nosotras Laura, que acababa de llegar el día anterior.

En principio planeábamos salir el viernes después de comer pero mARTadero organizaba un evento en el que Conchi y yo estábamos en el área de protocolo...lo que dio como resultado que saliéramos del trabajo a las 3 de la mañana y no pudiésemos hacer otra cosa que dormir. El evento era la "bohemia", un festival con tres plataformas repartidas por todo el paseo de las artes, donde los viandantes podrían escuchar música de bandas de la zona, ver las obras de los participantes en la BAU (bienal de arte urbano) y en conclusión pasar un buen rato. Nosotras teníamos que ayudar a los artistas en la medida de lo posible y también ofrecerles un espacio en el que descansar y un refrigerio...yo cuando vi las funciones y leí protocolo enseguida me vino a la mente la palabra azafata, pero bueno...

El sábado a eso de las 11 cogimos el autobús a Oruro desde la estación de buses. Llegamos allí a las 3 y media de la tarde y cual fue nuestra sorpresa al descubrir que el bus que salia a Uyuni más temprano era el de las 8 menos cuarto de la tarde :S. Comimos bocadillos en la estación y decidimos ir a conocer Oruro ya que estábamos allí a pesar de que estuvo lloviendo parte del día.
Tuvimos la suerte de que estuviera puesto el mercado, que nos hizo más entretenido el rato que pasamos allí ;).

Cogimos el autobús y llegamos a Uyuni a las 3 de la mañana. El autobusero amablemente nos dejó quedarnos a dormir en su autobús hasta las 7 de la mañana...y menos mal porque hace tiempo que no pasaba tanto frío. Todo el camino estuve congelada, Laura se metió dentro del saco...éramos el entretenimiento de los pasajeros, que llevaban millones de mantas encima.

Uyuni a esas horas estaba obviamente desierto. Teníamos el nombre de una agencia que nunca encontramos y mientras dábamos vueltas buscando una estación inexistente (eran puestos en la calle) una mujer muy amable nos ofreció información sobre los horarios y también como no sobre su agencia. 150 bolivianos por visitar el Salar todo el día y con el almuerzo incluido...(desde Cochabamba nos cobraban por todo el tour 195 dólares, es decir, unos 1700 bs...). Evidentemente aceptamos al instante. Nos llevó en coche hasta su agencia y nos dejó usar su baño, cambiarnos, desayunar...:)

El tour empezaba a las 10 y media así que decidimos dar una vuelta por Uyuni, que ya estaba abriendo sus establecimientos. Enseguida nos dimos cuenta de que se trataba de un pueblo muy turístico pero la verdad es que era bastante bonito a su vez.

A las 11 menos cuarto salimos para el salar. En el tour pudimos ver un cementerio de trenes, en los que por supuesto nos subimos, una pequeña aldea donde convertían la sal (un proceso interesante), el salar y finalmente la isla del pescado, lugar donde comimos.

No sabía cómo iba a ser el salar pero desde luego las fotos no le hacían justicia. A pesar de tener que llevar gafas de sol para poder mirarlo, era increíble ver todo aquello. 12.000 kilómetros cuadrados de sal, un paraíso natural allí en medio de ninguna parte. Te sentías ínfima pero a la vez importante. La isla del pescado tenía unos altísimos cactus de miles de años.

El guía nos contó que el Salar se formó cuando se evaporó el mar que allí se encontraba, hace millones de años.

A las 5 y media regresamos a Uyuni y estuvimos cenando y paseando hasta que saliera nuestro autobús a las 8. En esta ocasión aprendimos la lección y pagamos un poco más pero nos aseguramos la calefacción y la manta xD.

Llegamos a Oruro a lo que yo creía que eran las 12 porque se me había cambiado el reloj a cronómetro...y resultaron ser las 2 y media...no había buses a Cochabamba hasta las 3 y media (pero claro, creíamos que eran las 12 :S) así que finalmente cogimos un surubi (poco recomendable como ya dije antes) que nos trajo a Cochabamba en tres horas y cuarto.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Lugares que visitar en Bolivia: Chapare

La semana siguiente a visitar ToroToro fuimos a Villa Tunari o Chapare. En este caso fuimos de miércoles a viernes aprovechando que el miércoles era feriado (festivo).

Llegamos a la calle de la que salían los buses y compramos el pasaje, creyendo que sería un viaje de 45 minutos...cual fue mi sorpresa cuando nos enteramos de que en realidad eran 4 horas.

Cuando finalmente llegamos nos dirigimos al un hostal que nos habían recomendado llamado Bibosi. Después de los 20 bs. por noche de ToroToro la verdad es que cualquier precio nos hubiera dolido pero cuando dijo 90 los tres nos miramos sintiéndonos un poco tontos. No estábamos muy por la labor de seguir caminando y el hostal tenía desayuno y piscina decente así que nos quedamos allí.

Ese día nos dedicamos a estar en la piscina y cenar en la habitación de bocatas. Villa Tunari está en el Trópico, por lo que la temperatura me recordó bastante a la húmeda Málaga y me hizo querer irme nada más llegar pero era una buena oportunidad para ponerse los shorts asi que...

Al día siguiente visitamos los dos parques nacionales de la zona: Parque Machía y Carrasco. El parque Machía costaba 6 bs y 10 bs más por llevar la cámara. Nos recomendaron no meter nada más porque los monos te registraban los bolsillos...Visitamos el parque en poco más de dos horas, y por medio vimos un oso llamado Balú xDD, muchos monitos araña y un mono más grande que se encaprichó conmigo...

Por la tarde vimos el parque Carrasco, famoso por sus guácharos (pájaros autóctonos) y sus variedades de murciélagos (incluyendo el que se alimenta de sangre). El recorrido no era complicado pero el calor hizo que pareciera el doble. Las cuevas eran pequeñas y seguras…todo muy distinto a ToroToro. El recorrido nos costó 70 bs. y estuvimos alrededor de tres horas avistando murciélagos y extrañas mariposas en una selva que rugía cada vez que dábamos un paso.

Después de un día agotador volvimos a la villa, donde cenamos un plato típico boliviano: el silpancho. Consta de arroz, patatas (como no), dos huevos, ensalada y un filete de ternera rebozado muy finito y que cubre todo el plato. Delicioso.

El día siguiente volvió a ser día de piscina desde las 9 de la mañana por lo insoportable del calor. La búsqueda de un surubi de vuelta no fue sencilla (habían quitado las matriculas a los buses y no podían circular). Tras apuntarnos en una list y esperar dos horas logramos volver en tres horas a Cochabamba. Es mejor ir dormida en un surubi (monovolumen más o menos) puesto que sus conductores no suelen estar muy cuerdos y verlos conducir realmente te hace temer por tu vida.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Lugares que visitar en Bolivia: ToroToro

Después del famoso día del peatón tuvimos visita :) y fuimos a conocer algunos de los (como lo llaman ellos) atractivos de Bolivia. Ese mismo fin de semana fuimos a ToroToro.

ToroToro es un pueblo al norte del departamento de Potosí pero sólo se puede acceder desde el departamento de Cochabamba. Se tarda entre 4 y 5 horas y su altura va desde los 1900 hasta los 4000 metros.
Pues bien, el viernes por la tarde hacemos las mochils y vamos en busca de la parada de buses. Los taxis nos rechazan porque dicen que a esa zona no van...nos quedamos un poco alucinados la verdad. Al final uno accede a llevarnos y tras preguntar encontramos la estación, donde nos dicen que no quedan asientos pero que podemos ir en la grada con almohadones. Preguntamos qué es la grada...son las escaleras por las que la gente sube a sus asientos...puff, pero solo hay un autobús al día asi que...grada.
Tras cinco horas en las gradas y un imponente dolor de espalda llegamos a ToroToro a las 11 de la noche...obviamente está todo cerrado pero el hostal al que llamamos es de los mismos que el bus asi que solo tenemos que bajarnos y ya estamos practicamente en la cama. El hostal cuesta 20 bolivianos la noche...si, eso son 2 euros, las vistas son increibles y hay hasta terraza, es un poco absurdo todo pero... pagamos las dos noches encantados y a dormir.

A la mañana siguiente tras desayunar mirando las montañas nuestro zumito en bolsa y donuts xdd vamos a la oficina que está en la plaza a informarnos de los tours. ToroToro es famoso por sus supuestas huellas de dinosaurios y sus increíbles cuevas. En la oficina pagamos 30 bolivianos por entrar al parque nacional y luego nos enseñan que hay 5 o 6 recorridos. Para realizar los recorridos era necesario ir con guía, cosa que entendimos tras el primer día. Cada recorrido costaba 100 bolivianos más la movilidad, 4x4 porque era un camino de cabras....más bien de ovejas.

Decidimos que el primer día haríamos dos recorridos, uno por la mañana y otro por la tarde. Estaba bastante alejado por lo que la movilidad todo el dia nos costaba 300 bolivianos asi que en total fueron 500.

Nuestro guía no hablaba mucho pero era de nuestra edad más o menos y parecía buena gente, se reía con nosotros xDD (el que mas cabezazos se diera con el casco en la cueva pagaba la cena). El primer recorrido nos llevo a la Ciudad de Itas, una zona antes cubierta por el mar. Había que escalar en algunas zonas y todo lo que había hecho el mar a las rocas era increíble de ver. Lo más gracioso fue la parte que teníamos que escalar sí o sí y para subir había una rama de árbol que se movía un montón...

Después de esa visita por la mañana subimos de nuevo a la movilidad y nos dirigimos a la cueva de Umajalanta, la más famosa de ToroToro.
Antes de entrar en cada sitio nos hacian firmar, al salir también..era como en el Wayna Pichu, se aseguraban así de no perder a nadie por el camino.

Lo más gracioso que en la lista de registro eran todo bolivianos...los turistas suelen ir por agencias...que les crujen claro :S

Después de pasar un rato horrible en el coche y que me pusieran en el suelo con los pies hacia arriba para que se me pasara el mareo :S paramos a comer antes de entrar a la famosa cueva.
Sinceramente me esperaba que al ser tan turística la cueva fuera bastante más sencilla. El guía poco a poco empezó a parecernos contorsionista porque había zonas en las que teníamos que pasar tumbados, bajar por cuerda solamente porque resbalaba horrores todo el suelo, yo no pude evitar caerme, algo común en mí, pero fue de culo en una zona tranquila en la que me resbalé por la arena.
Fue un día bastante completo y tras cenar un pollo frito con más arroz que pollo, nos fuimos a duchar y a dormir.

Al día siguiente buscamos algo un poco más tranquilo (o eso parecía en un principio) porque después de comer cogeríamos de nuevo el bus, esperando que esta vez no fuéramos en las gradas...

A las 7 y media de la mañana quedamos con el guía para que nos diera tiempo y no apurar demasiado. El tour consistía en ver algunas huellas de dinosaurio, el mirador y después subir y bajar a las cascadas. Todo el camino nos acompañó un cachorro al que acabé cogiendo mucho cariño pero que no pude meter en el autobús :S sé que era pequeño porque mordía cosas debido al crecimiento de sus dientes pero estaba muy sucio y no tenía dueño, como la mayoría de los perros en bolivia, me resulta algo muy triste. Aunque no logramos que respondiera al nombre de Bimbo nos acompañó durante todo el día, incluso viéndonos subir al autobús.

El mirador era una cosa increíble, debajo de él estaba el río y las paredes de roca lo hacían todo inmenso. La bajada a la cascada fue bien, aunque constaba primero de millones de escaleras y después de piedras enormes que nos hacían poner a prueba nuestro físico. La cascada del Vergel era impresionante de ver, rodeada por altos muros y apareciendo de la nada prácticamente. La vuelta no fue tan sencilla como la ida. Las escaleras eran altas y escarpadas, por lo que a cada rato tenía que parar debido al asma y un poco a la altura a la que nos encontrábamos.

Finalmente llegamos al hostal de nuevo a las 12 y media, mucho antes de lo esperado, y comimos tranquilamente antes de coger de nuevo el bus, que esta vez era un poquito más confortable, o puede que fuera el cansancio.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Día del peatón

A la vuelta de Perú no tuve ni un momento de descanso, esa semana trabajé los siete días porque el domingo se celebraba el día del peatón y se supone que lo coordinaba mi área...Esta vez dejo adjunta la memoria que hice para que entendáis perfectamente qué es y qué hicimos ;)

El día del peatón se celebra entre dos y tres veces al año. Antes era tan sólo en Cochabamba pero desde este 4 de septiembre se ha extendido a toda Bolivia. Desde que se creó, hace ya 13 años en la provincia de Cercado, su principal objetivo ha sido sensibilizar a la población sobre la contaminación que emite el parque automotor. El día del Peatón prohíbe la circulación de vehículos a motor desde las 12 de la noche hasta las 6 de la tarde con el fin de intentar reducir la contaminación. Las asociaciones culturales aprovechan que se trate de domingo para realizar actividades que ayuden a asumir esta realidad a los bolivianos, la necesidad de contaminar menos, reciclar y empezar a concienciarse de cuidar su planeta.

Desde el mARTadero también se busca esta concienciación y con esa idea se prepararon las actividades de este día del peatón, puede que un poco más dedicadas a los niños.
Mediante estos cuatro juegos, que se explican a continuación, se pretende concienciar tanto a los niños como a los adultos de que debemos cuidar y respetar el medio ambiente. En el juego de la izquierda, el primero, se colocaron distintas palabras relacionadas con el medio ambiente con las letras descolocadas. Mediante la pista en la parte inferior tenían que adivinarla. En la mesa se colocaron un montón de letras para que los niños pudieran colocarlas de un modo mucho más interactivo. En el segundo juego se dio al alfabeto un nuevo código y se hicieron distintas frases relacionadas con el reciclaje que los niños tenían que adivinar cambiando los símbolos por letras.
El tercer juego es el laberinto. Cada participante elige un residuo y lo lleva pasando por el laberinto hasta el contenedor que le corresponda, es decir, debe distinguir entre los residuos orgánicos, plástico, latas y vidrios y decidir en qué contenedor introducirlo tras traspasar el laberinto.
La cuarta actividad consistía en pintar, recortar y montar (pegar) uno de los dos modelos: vaca o águila real. Debían poner en sus panzas mensajes de apoyo al medio ambiente. Es una actividad que tuvo una muy buena acogida por los niños, como se puede ver en las imágenes. Después de hacer todo esto, los niños colgaban ellos mismos sus creaciones en la parte delantera de la carpa mediante pinzas.

En cada uno de los juegos que superaban se daba a los participantes una ficha (gota de agua, ratón, árbol y símbolo del reciclaje). Cuando tuvieran las cuatro fichas debían entregárselas a las personas responsables de la última actividad, que les premiaban con un plantín que debían cuidar o bien una mochila o una bolsa, que debían utilizar en lugar de las bolsas de plástico.
Además de las actividades relacionadas con el medio ambiente, los niños pudieron disfrutar en primer lugar de un recorrido en el que calentaron motores, actividad que realizó el Taller de niños. La actividad constaba de varias partes, primero era una carrera de aros, después otra en patinete, luego tenían que lograr morder una manzana atada a una cuerda y finalmente lograr meter en un cubo dos tapas tras llevarlas metidas en un cubo y entre las piernas.

Aparte de todas las actividades destinadas en mayor medida a los niños, mARTadero presentó un programa pensado para los adultos, en el que destacaron la actuación del grupo de rap “Vergüenza ajena” y la actuación de los alumnos de las clases de hip hop que se dan a diario en mARTadero. Mediante la apertura de una parte del edificio del antiguo matadero municipal los viandantes pudieron disfrutar de estas actuaciones


martes, 6 de septiembre de 2011

Machu pichu y Puno

Bueno pues me quedé en Perú...Machu Pichu
Realmente no sabía bien donde iba según íbamos subiendo montañas para llegar al famoso Machu Pichu. Supongo que de tanto oir hablar de él al final no sabes ni lo que vas a ver, pero en este caso me sorprendió gratamente.

Era increíble, tanto las vistas, como el lugar, todas esas montañas alrededor...y la historia. Me fascinó la cultura inca, su forma de ver la vida, de creer en vivir en las montañas para estar más cerca de sus dioses...

Después de conocer toda la edificación y su historia, llegó el momento de subirse al Wayna Pichu. Y parece que no, pero la montaña impone y mucho. Mentalizada todo lo que podía estar empezamos a ascender y una hora después, tras parar mil veces y creer que se me salía un pulmón por la boca, llegamos. Estaba todo nublado si, pero cuando subes ya no se trata de las vistas sólo, es algo más personal.
La bajada me costó menos por la cuestión del aire pero era bastante más peligrosa. El papelito que te hacen firmar al entrar desentendiendose de ti empezaba a tener sentido. Y si para bajar tenia que sentarme en las escaleras lo haría...y lo hice porque no me cabian ni los pies en esas mini escaleras...

Después vinieron las aguas termales de Aguas Calientes, el turístico pueblo de debajo, que si estaban bastante sucias y atestadas de gente pero nos relajaron gracias a lo que ardían las piscinas ;)

Tras MachuPichu vinieron dos dias de descanso en Chinchero, que aprovechamos para pintar un muro de la escuela que estaba a medio decorar. Fue un trabajo gratificante y parece que al menos el resultado gustó. Conocimos otro modo de enseñar en la escuela, aunque éste no nos gustó. Puede que la enseñanza en España esté muy mal pero está a Perú no le va mucho mejor.

Luego vino Puno y su lago Titicaca. Conocimos las islas Uros, islas artificiales donde vive gente...tienen que estar cada mes poniendo un montón de juncos para no hundirse...es otra forma de vida desde luego. Y gracias a la energía de las placas solares nos aseguraron que vieron en sus teles ganar a España el Mundial. Nuestra cara debió de ser un auténtico poema...que un indígena que vive en una isla flotante en Perú te diga que ha visto el Mundial...te deja por lo menos sin habla.

Islas demasiado dadas al turismo, pero gracias a eso sus hijos van a la universidad...Claro que cuando me enteré de que el semestre en Cochabamba cuesta en la Universidad pública 7 bolivianos (70 céntimos) mi cara tuvo que ser curiosa también...

Conocimos también a fondo Puno, aparte de Chucuito (pueblo con una zona de restos incas compuestos por un monton de piedras con forma de falo), donde nos querian vender llaveros con forma de falo...curioso cuanto menos

Volvimos a Chinchero a tiempo para conocer una feria de agricultura (muy muy norteamericano) con sus concursos de perros que pasan por aros, concursos de cabras, danzas típicas y por supuesto comida y bebida a exportar y finalmente aerosur nos trajo de vuelta a Cochabamba.